.
A Pasión no le gustan los cuartos oscuros, ni las cárceles estrechas, ella es vital,le gusta dar la cara al viento y sentir el empuje de su fuerza.
.
Se aburre en la espera y se crece cuando el misterio es compulsivo. Así es Pasión,como el goteo misterioso del nacimiento de un río que discurre como aguas bravas y descansa en remansos para luego ir en busca de su destino ¡.
.
... así empezaría una historia que fuese acompañada de una de mis fotografías.
Ah..., ¿y si la Pasión pudiera pensarse no como esa pulsión explosiva del sentimiento que todos iamginamos, ese desbordamiento emocional que busca, incapaz de retenerse entre sus propios límites, desbocarse en sí mismo, lanzarse al vértigo del deseo incontenible, desplegarse en la corriente tumultuosa que no puede controlar... -ah, el placer de la disolución en la caída, ah, el placer de la anegación en el abismo- sino que pudiera pensarse como un fervor constante y humilde, una devoción intensa y perdurable que se entrega a la búsqueda de su perfección o su plenitud para dar los mejores frutos de sí mismo?
ResponderEliminar¿No podría pensarse la Pasión como una brasa que lentamente enciende el corazón y lo mantiene inflamado sin quemarse en vez de un incendio que se consume en llamas virulentas?
Si el objeto del deseo lo conoce y lo permite en el tiempo, sí . Si el objeto del deseo tiene fecha de caducidad, convendràs conmigo que no puede pensarse como tu expresas, a no ser que hables en términos generales, como lo haría un coleccionista de objetos sin vida.
ResponderEliminarPero si hablamos de personas, aquí son dos los que concurren y desean, debe imperar la equidad, el pactar y en última instancia, saber que, a falta de convenio y preveyendo una cadena de desacuerdos, habrá un triste final.
Yo creo claramente diferenciada la Pasión, principalmente en dos vertientes.
1 - La Pasión aplicada a los objetos, a las aficiones, al trabajo, a la lectura, és decir a todo aquello que despierte en mí una pasión y que el sentirla sea directa, pero no compartida.
2 - Cuando se trata de personas el contexto cambia, dado que el diferencial, será la finalidad de compartir, pactar, compensar, buscando siempre el bien de ambos.
Otra cosa es la pasión escondida, vivida en la oscuridad y en silencio, aunque esta solo interesa al que la siente.
Carai... reduzcamos nuestro ámbito de análisis, pues.
ResponderEliminarCentrémonos en la pasión entre personas.
Pero antes, ¿ya hemos admitido, entonces, que la pasión puede ser la fuente de caudal inagotable, aunque no necesariamente tumultuoso, de la que brota la energía que da sentido a una vida?
Bien, pasemos adelante...
Afirmas que el objeto de esa pasión entre personas es el "bien de ambos". Parafraseas aquel diálogo de Platón en el Fedón sobre el objeto del amor, ¿te acuerdas de él? Tú vas más allá, por supuesto, eres mujer de tu tiempo y sabes que nada existe sólo dentro de la propia conciencia, no somos seres solipsistas. Para conseguir el "bien de ambos", dices, debe haber acuerdo, equidad; si no, habrá un triste final... Qué fatídico suena eso, pero puede que tengas razón, no lo sé. Los humanos lo somos en cuanto que lo somos con los otros humanos. Y si no hay acuerdo entre personas, habrá desacuerdo, puede que confrontación, si no indiferencia. Incluso la "pasión escondida" existe "en relación a otro", que la ignora o la niega.
Hemos cambiado de tema, ¿no te parece? Hemos pasado de aclarar el sentido del término pasión, de determinar los ámbitos de su aplicación, a discutir qué circunstancias la incentivan y permiten hacerla crecer, y cuáles la agotan o la atrofian.
Vuelvo al princpio.
Una pasión que no nuble la razón sino que la ilumine y le ofrezca el placer de la inteligencia. Esa sería tal vez la pasión que tú afirmas ir dirigida más hacia los objetos, las aficiones... Podríamos resumirla diciendo que se aplica a los objetos mentales o intelectuales.
¿Puede haber una pasión semejante entre personas? No veo, a priori, por qué no. ¿Puede una pasión amorosa ser constante e intensa sin necesidad de ser impetuosa ni expansiva? ¿No hay personas tímidas, recelosas, inseguras, temerosas, reprimidas, sacrificadas... que se enamoren "apasionadamente" de alguien que, por las razones que sean, no está a su alcance? Puede. ¿Esa sería la pasión escondida? Puede que sólo le interese al que la siente, claro, pero no por ello es menos trascendente ni legítima para esa persona, si esa persona la siente de verdad y quiere vivir con ella o no sabe o no puede vivir sin ella.
¿Es sano o insano, es coherente o incoherente, es recomendable o no? Esa es otra cuestión, supongo.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminar