lunes, 5 de marzo de 2012
* Wukan la victoria de un pueblo rebelde
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Este video, hay que verlo con atención, encierra una lección de como tomar partido ante un gobierno, aplicando una democracia real y activa, la única arma válida para luchar de manera pacífica contra una injusticia social, provocada por una demasiado larga confrontación política, nefasta para la ciudadanía.
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China es un país alejado de Occidente, muchas cosas nos separan distinta cultura, distinta idiosincracia ... pero las motivaciones de un pueblo que busca soluciones a sus problemas y que han visto año tras año como la injusticia se adueña de su día a día, hasta unos límites insostenibles, las hay en todas las comunidades del mundo, el gran secreto es la convivencia, el respeto y la defensa de la propia estima, para hacer frente al gigante que nos invade y este pueblo llamado Wukan, es un magnífico ejemplo a seguir.
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Todos sabemos que China es un gran país que está despertando y que no tardará mucho en alcanzar la primacía mundial, compartida con India ... y está por ver si Occidente compartirá también un lugar privilegiado ya que su evolución está mermando sus posibilidades al efecto.
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Las causas por las que los países pierden sus privilegios, las estamos viendo y sufriendo en nuestro propio país.
Todos los políticos que nos han y están gobernando últimamente, siguen afanados en sus trifulcas de haber quien se lleva el gato al agua, sin darse cuenta que con estas premisas se está malmetiendo los ideales que encierra la Democracia, tales como la Justicia y la Igualdad.
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Nosotros no somos un pueblo chino. Nuestras condiciones són muy diversas y múltiples.Pero hay una realidad evidente en nuestros paises occidentales... estamos rodeados de chinos en nuestras propias ciudades y por ellos tenemos una ligera idea de lo trabajadores y solidarios que són , cuando llegan. Aquellos que llevan más decadas entre nosotros , forman parte de nuestra sociedad sin problemas de lengua y costumbres, totalmente adaptados, pero siguen siendo trabajadores, sencillos y respetuosos.
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Nosotros, mayoritariamente también lo somos, aunque con algunas diferencias de carácter, pero corremos peligro de acomodarnos, ante el comportamiento de nuestros políticos, olvidando que uno de los derechos de la Demoracia que tenemos, es defenderla de aquellos que en su nombre actúan contra los intereses del pueblo, en favor de unos pocos.
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Debemos tomar conciencia, de lo que está en juego y, que nadie piense que el trabajo lo tienen que hacer los demás ya que todos tenemos el deber de contribuir en llevar la Democracia adelante con toda dignidad.
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