* Algo huele a podrido

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La experiencia me dice que algo huele a podrido.
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No es que esté en contra de la idea de ayudar a quien lo necesita, sobretodo si los que la solicitan estàn bajo un regimen no sólo dictatorial, sino caprichoso y cruel, aun teniendo además, dicho mandatario sus propios seguidores y entre ellos unos cuantos mercenarios dispuestos a lo que sea, previo pago.
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Lo que ocurre es que repasando por encima la historia de las intervenciones bélicas de EEUU, el saldo no és todo lo eficiente, justo y desinteresado que tendría que ser su cometido humanitario en pro de la Paz. No sé porqué, los sucesivos gobernantes americanos y sus casi siempre fieles colaboradores, por aquello de ... " quien a buen árbol se arrima, buena sombra le cobija ", siempre esconden bajo tupida alfombra de brazos protectores, unos intereses "poco claros" una veces y otras demasiado evidentes.
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Creo que todos sabemos la interminable cadena de favores que se abren en estas ocasiones, donde cada uno lleva bajo el brazo su propia carpeta de peticiones, para abrirla en el momento preciso, en la mesa de negociaciones.
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Yo diría que en esta ocasión la mullida alfombra de EEUU y sus colaboradores , huele bastante, ya que , si bien es verdad que los rebeldes de Libia, ahora en franco retroceso de sus logros, necesitan ayuda, no es menos cierto que otros países, metidos en harinas de guerra, ó lo que és más decepcionante y triste, " por no tener algo que ofrecer " a cambio de atención , porque en princio lo que primero necesitan es que alguien les escuche, se encuentran en el territorio de "nunca jamás... seràn escuchados ".
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No importa la clase de ayuda que necesiten, sino la moneda de cambio que tengan y del interés que ésta suscite entre sus "benefactores".
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Y luego estàn las increibles e interminables alianzas, convenios y tratos entre los mismos "benefactores-colaboradores" , cuyas conversaciones y acuerdos transaccionales que, aún llegando a feliz tèrmino, sean o no transparentes a todos los niveles lícitos y deseables, se materializan bajo la mencionada tupida alfombra...
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... y todo ello... mientras las afortunadas legiones de rebeldes y víctimas, ven diezmadas sus reservas y digo afortunadas, porque me refiero a las que sí tienen moneda de cambio ... las demàs, las no escuchadas ... tienen pocas probabilidades !